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Resumen:Los trastornos del sueño figuran entre los problemas del comportamiento más frecuentes en la lactancia y en la primera infancia. La clínica de dichos trastornos es muy rica y variada en todas las edades, siendo de gran importancia las alteraciones precoces del sueño infantil. Distinguimos los comportamientos vinculados al adormecimiento (insomnio inicial o tardío, rituales al acostarse, fobia a acostarse) de las conductas patológicas que aparecen en el transcurso del sueño, como las angustias nocturnas (terrores nocturnos, sueños de angustia y despertar ansioso), el sonambulismo, los automatismos moto- res, la enuresis nocturna y las apneas del sueño (2,3).
La prevalencia de los trastornos del sueño varía en función de la definición utilizada y del tipo de problema que se estudie; lo cierto es que aproximadamente un 25% de los lactantes, entre 6 y 12 meses de edad, se despiertan por las noches una o más veces, entre la medianoche y las 5 de la mañana, al menos durante 4-7 días a la semana y durante 4 semanas consecutivas como mínimo. Los niños alimentados con lactancia materna tienen una preva- lencia aún más alta. También existe una mayor frecuencia en niños con determinadas procesos, como la dermatitis atópica, y en niños con antecedentes patológicos perinatales. Igualmente se ha relacionado una mayor prevalencia de trastornos del sueño con alteraciones del temperamento del niño y con la ansiedad por parte de los padres, así como con alteraciones de la higiene normal del sueño y la cohabitación en el dormitorio de los padres. |